La versión de este artículo que provocó esa «guerra civil» en la Asociación del Pacífico https://florentinorodao.com/falange-en-extremo-oriente-1936-1945/ llamó la atención en inglés por una razón diferente: negar que Andrés Soriano fuera fascista. Soriano era el hombre más rico de las islas, el dueño de la San Miguel, el único al que la Coca-Cola le ha dado la distribución en todo un país, fundador de la Philippine Air Lines y dueño de más de sesenta empresas en tres continentes. Políticamente, era miembro de Renovación Española y seguidor de José Calvo Sotelo, monárquico y uno de tantos fascistizados. Y se hizo una foto a principios de 1938 alzando la mano. Pero no era fascista. Ese artículo recuenta los intentos de Falange de ser un partido independiente de las elites frente a las “extremas derechas de toda la vida” y los esfuerzos de Soriano para dominar a los falangistas, entre ellos ese día en que alzó la mano para cooptar a la Falange. En Filipinas, resulta difícil explicar las diferencias entre carlistas meapilas, reaccionarios monárquicos y “revolucionarios” falangistas.
Spanish Falange in the Philippines, 1936-1945. Philippine Studies. 43-3 (1995): 3 -27. ISSN 0031-2013-7837