Un buen número de chinos fueron a Cuba y América Latina en el siglo XIX en condiciones cercanas a la esclavitud, porque, aunque iban de forma temporal las condiciones eran penosas. Es un tema de mucha discusión porque hay muchos tipos de esclavitud y aunque había algo de legislación para proteger a los emigrantes, se violaba tanto como en el caso de los negros. El tratamiento a los asiáticos o culíes fue solo poco mejor. El artículo trata de dar unas cifras siguiendo la documentación española y ofreciendo estadísticas datos sobre esa implicación de las autoridades en lo que parece que es la única política española en Asia a lo largo del siglo XIX: proveer de mano trabajadora a los ingenios cubanos de azúcar. De hecho, el consulado general de España siguió en Macao hasta 1868, a pesar de la escasa importancia de esta ciudad, precisamente porque desde ahí se podían enviar esos buques a América Latina con menor supervisión de las autoridades chinas. En Japón, hay un incidente famoso, el María Luz, por un culí que se escapó de un buque camino de Perú, que revela estas condiciones.
Con Luis E. Togores. “Esclavitud, servidumbre y abolición en Extremo Oriente: el caso español. Madrid: CSIC, 1989, pp. 135-149. ISBN 84-00-07019-4