Ecología de necesidad

Desde Asia oriental, con estas densidades de población es posible imaginar cómo evolucionarán algunas normas para proteger el medio ambiente. Lo han hecho históricamente por necesidad y, cuando las ardillas aún se paseaban por las copas de los bosques ibéricos, ya se ordenó en Japón a quien cortara un árbol reponerlo con otro. Desde hace décadas, se ha tratado de racionalizar el uso del agua, a pesar de lo que llueve. Es difícil poder tener casa con piscina, el agua del baño se comparte (la limpieza se hace antes de entrar) y las cisternas ofrecen la posibilidad de aguas menores y mayores, además de poderse utilizar al entrar para lavarse las manos. Lo mismo ocurre con las basuras, que también se dividen desde hace décadas. Desde hace años, además, está prohibido el uso de bolsas negras, para poder comprobar que la selección se hace correctamente. E incluso se ha ido contra los infractores buscando documentos entre la basura para identificarlos. La excepción en Japón son las decenas de millones de palillos de madera derrochados a diario, que se tiran tras utilizarse para una sola ocasión. Dicen que no provoca el corte de árboles porque es la madera sobrante de hacer vigas, pero es más factible pensar en la predilección cultural japonesa por lo efímero. O que, como es madera comprada fuera, preocupa menos porque no se daña los bosques japoneses.

 

http://hemeroteca-paginas.lavanguardia.com/LVE01/PUB/2002/06/28/LVG20020628058LVB.pdf

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